miércoles, 31 de agosto de 2011
La Buena Tiniebla
Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera un resplandor que da confianza
de modo que si sobreviene
un apagón o un desconsuelo
es conveniente y hasta imprescindible
tener a mano una mujer desnuda.
entonces las paredes se acuarelan
el cielo raso se convierte en cielo
las telarañas vibran en su ángulo
los almanaques dominguean
y los ojos felices y felinos
miran y no se cansan de mirar.
una mujer desnuda y en lo oscuro
una mujer querida o a querer
exorcisa por una vez la muerte.
Mario Benedetti
Todavía estoy viva
Mis días adolecen del recuerdo
como ese cielo que buscaba atrapar
idéntico a la luna que me robé
de otros veranos
o las estrellas
que coseché detrás del sauce.
Y quise tejer ilusiones
que alimentaran mi alma
de la más vibrante emoción
de sentirme viva
hasta explotar en cristales
que caen presurosos
y se fragmentan en mi interior
presagiando el llanto.
No los dejo alcanzarme
me regocijo con la luna
aliada de mis estados
o el rocío que humedece mi rostro
y me refresca la memoria
de mis vidas diáfanas
adonde las paredes de mi morada
están limpias
del hedor de la tristeza.
Y dejo entrar por las rendijas
el aire puro de tantas noches
desveladas al olvido.
Elbi (Derechos reservados)
como ese cielo que buscaba atrapar
idéntico a la luna que me robé
de otros veranos
o las estrellas
que coseché detrás del sauce.
Y quise tejer ilusiones
que alimentaran mi alma
de la más vibrante emoción
de sentirme viva
hasta explotar en cristales
que caen presurosos
y se fragmentan en mi interior
presagiando el llanto.
No los dejo alcanzarme
me regocijo con la luna
aliada de mis estados
o el rocío que humedece mi rostro
y me refresca la memoria
de mis vidas diáfanas
adonde las paredes de mi morada
están limpias
del hedor de la tristeza.
Y dejo entrar por las rendijas
el aire puro de tantas noches
desveladas al olvido.
Elbi (Derechos reservados)
martes, 30 de agosto de 2011
Bolero
Qué vanidad imaginar
que puedo darte todo, el amor y la dicha,
itinerarios, música, juguetes.
Es cierto que es así:
todo lo mío te lo doy, es cierto,
pero todo lo mío no te basta
como a mí no me basta que me des
todo lo tuyo.
Qué vanidad imaginar
que puedo darte todo, el amor y la dicha,
itinerarios, música, juguetes.
Es cierto que es así:
todo lo mío te lo doy, es cierto,
pero todo lo mío no te basta
como a mí no me basta que me des
todo lo tuyo.
Por eso no seremos nunca
la pareja perfecta, la tarjeta postal,
si no somos capaces de aceptar
que sólo en la aritmética
el dos nace del uno más el uno.
la pareja perfecta, la tarjeta postal,
si no somos capaces de aceptar
que sólo en la aritmética
el dos nace del uno más el uno.
Por ahí un papelito
que solamente dice:
que solamente dice:
Siempre fuiste mi espejo,
quiero decir que para verme tenía que mirarte.
quiero decir que para verme tenía que mirarte.
Julio Cortázar
La geometría de tu ausencia
No conté tus horas de ausencia
ni recorrí mis sábanas
hilvanadas con retazos de tu piel
serpenteando este lecho maltrecho
con tu perfume flotando
como un vapor invisible
inflamando mis ansias
de quedar pegada
a tu anatomía
adonde libré una batalla
sensual y voluptuosa
cautiva en tu virilidad
extenuada en tu arrogancia
moribunda de tus caricias
sin ansias de amanecer
en otro círculo
que no sean tus abrazos
en otra ausencia que no sea la tuya
en otro espejo que no te refleje.
Elbi (Derechos reservados)
ni recorrí mis sábanas
hilvanadas con retazos de tu piel
serpenteando este lecho maltrecho
con tu perfume flotando
como un vapor invisible
inflamando mis ansias
de quedar pegada
a tu anatomía
adonde libré una batalla
sensual y voluptuosa
cautiva en tu virilidad
extenuada en tu arrogancia
moribunda de tus caricias
sin ansias de amanecer
en otro círculo
que no sean tus abrazos
en otra ausencia que no sea la tuya
en otro espejo que no te refleje.
Elbi (Derechos reservados)
lunes, 29 de agosto de 2011
Huelga de silencio
Resisto una huelga de silencio
y mis ideas reposan delgadas
al ras de una página en blanco.
Soy un silencio obstinado
y una silla vacía
en un horizonte
donde los pensamientos
son como arenas tibias
esfumándose
por las líneas delgadas
de mi raciocinio,
receptáculo de mi reflexión,
hacedor de palabras,
constructor de utopías.
Soy un silencio errante
abarcando universos
de líneas transparentes,
acunado en un vacío sostenido
en el eje ecléctico
de un espejismo,
como una brisa inconmovible
reposando
en las esferas serenas
de mi inspiración.
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y mis ideas reposan delgadas
al ras de una página en blanco.
Soy un silencio obstinado
y una silla vacía
en un horizonte
donde los pensamientos
son como arenas tibias
esfumándose
por las líneas delgadas
de mi raciocinio,
receptáculo de mi reflexión,
hacedor de palabras,
constructor de utopías.
Soy un silencio errante
abarcando universos
de líneas transparentes,
acunado en un vacío sostenido
en el eje ecléctico
de un espejismo,
como una brisa inconmovible
reposando
en las esferas serenas
de mi inspiración.
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MEDIANOCHE EN PARÍS (Un viaje de ensueño)
Siendo París la ciudad por excelencia, que ha podido universalizar su belleza, debe seguramente haber tantas París como gentes que la visitan, la viven, la gozan, la imaginan o la recuerdan. La París de Woody Allen es mitad París y mitad Woody, es un viaje hacia un pasado de película. Satirizando sus personajes nos transporta a un París que transforma lo fugáz en eterno. Maravilloso e inolvidable film!
domingo, 28 de agosto de 2011
Escepticismo
Amanece y aún es la noche
llevo puesto un traje de sombras
como aura
que se escabulle
entre las casas en ruinas
de mis pesadillas
donde no hay paredes blancas
ni pulidas
cae el concreto
haciéndose trizas
contra el piso
y un pájaro herido
picotea los cristales gastados
de un cuarto vacío de ilusiones
solo habitado por la pena
cual estigma que deseo
socavar de mi corazón.
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llevo puesto un traje de sombras
como aura
que se escabulle
entre las casas en ruinas
de mis pesadillas
donde no hay paredes blancas
ni pulidas
cae el concreto
haciéndose trizas
contra el piso
y un pájaro herido
picotea los cristales gastados
de un cuarto vacío de ilusiones
solo habitado por la pena
cual estigma que deseo
socavar de mi corazón.
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Dudo en llamar con el nombre
bello y serio de tristeza,
a este sentimiento desconocido,
cuya dulzura y cuyo dolor
me tienen obsesionada.
Es un sentimiento
tan completo y egoísta
que me llega a dar vergüenza,
mientras que la tristeza
me ha parecido siempre honrosa.
Conocía el arrepentimiento,
el fastidio y hasta el remordimiento.
La tristeza, no.
Ahora siento algo que me envuelve,
como una seda enervante y dulce,
y que me separa de los demás.
Francoise Sagan (Tristeza)
sábado, 27 de agosto de 2011
Preludio de amor
Como un traje hecho a mi medida,
cual agua de manantial
que transparente
se desliza hacia su cauce.
Así es, así es, mi amor por ti !
Como la pureza del rocío
que mi sauce llora en la noche,
de esos cristales de luz
que irradia una gota de lluvia.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como el azul profundo de mi cielo,
que dulcemente acaricia a la montaña,
cuando el sol enamorado de la aurora
calienta los viñedos de mi tierra.
Así es, así es, mi amor por ti!
Cómo ese pájaro
que canta en mi ventana
y me despierta a la vida cada día,
de esa brisa diáfana
que con aroma a madreselvas
despeina mis cabellos.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como esa plazoleta provinciana
con pérgolas ungidas de recuerdos,
de aquella tarde
de dulces aromas y sabores
que desbordaban nuestros cuerpos.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como las estrellas de plata,
que traviesas
espiaban nuestro acto de amor,
un San Valentín que nos hipnotizó
desbordados en pasión.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como el río cristalino
que se lleva los recuerdos
de caricias y de besos,
de aquella noche
en que creí que partías
y oré en silencio.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como el dulce insomnio
que recrea la caricia perdida,
en esta espera
con aroma a desesperanza.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como este traje de ilusiones
que me va quedando grande,
de alegrías y risas
que enmudecen con el llanto.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como las promesas
que el amor de hoy arranca de tus labios
en esa melodía
elegida como nuestra plegaria.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como ese refugio que sueño
me construyas algún día,
con paredes blancas
adonde colgaré
mis cuadros de ilusiones,
mis muebles de ilusiones,
mis adornos de ilusiones.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como la lujuria,
el frenesí y el éxtasis
que fuimos capaz
de inventar en un segundo.
Así es, así es , mi amor por ti!
Como la cachetada de la ausencia
adonde mora la nostalgia,
de vos y yo en un lecho nupcial,
diáfano, cristalino,
con aroma a vos,
con sabor a vos.
Así es, así es, mi amor por tí!
Elbi (Derechos reservados)
cual agua de manantial
que transparente
se desliza hacia su cauce.
Así es, así es, mi amor por ti !
Como la pureza del rocío
que mi sauce llora en la noche,
de esos cristales de luz
que irradia una gota de lluvia.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como el azul profundo de mi cielo,
que dulcemente acaricia a la montaña,
cuando el sol enamorado de la aurora
calienta los viñedos de mi tierra.
Así es, así es, mi amor por ti!
Cómo ese pájaro
que canta en mi ventana
y me despierta a la vida cada día,
de esa brisa diáfana
que con aroma a madreselvas
despeina mis cabellos.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como esa plazoleta provinciana
con pérgolas ungidas de recuerdos,
de aquella tarde
de dulces aromas y sabores
que desbordaban nuestros cuerpos.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como las estrellas de plata,
que traviesas
espiaban nuestro acto de amor,
un San Valentín que nos hipnotizó
desbordados en pasión.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como el río cristalino
que se lleva los recuerdos
de caricias y de besos,
de aquella noche
en que creí que partías
y oré en silencio.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como el dulce insomnio
que recrea la caricia perdida,
en esta espera
con aroma a desesperanza.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como este traje de ilusiones
que me va quedando grande,
de alegrías y risas
que enmudecen con el llanto.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como las promesas
que el amor de hoy arranca de tus labios
en esa melodía
elegida como nuestra plegaria.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como ese refugio que sueño
me construyas algún día,
con paredes blancas
adonde colgaré
mis cuadros de ilusiones,
mis muebles de ilusiones,
mis adornos de ilusiones.
Así es, así es, mi amor por ti!
Como la lujuria,
el frenesí y el éxtasis
que fuimos capaz
de inventar en un segundo.
Así es, así es , mi amor por ti!
Como la cachetada de la ausencia
adonde mora la nostalgia,
de vos y yo en un lecho nupcial,
diáfano, cristalino,
con aroma a vos,
con sabor a vos.
Así es, así es, mi amor por tí!
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viernes, 26 de agosto de 2011
Despertar
Ni mis días vacíos
ni mis desvelos gastados
ni mis horas quietas
pueden vulnerar mis amaneceres
al instante único en que mi vista
se concentra en la contemplación
de mi jungla interna
fusionándose con la geometría
de un paisaje que cautiva
el costado visible de mi conciencia
al cotidiano instante
de abrir mis persianas
y despertar a la vida.
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ni mis desvelos gastados
ni mis horas quietas
pueden vulnerar mis amaneceres
al instante único en que mi vista
se concentra en la contemplación
de mi jungla interna
fusionándose con la geometría
de un paisaje que cautiva
el costado visible de mi conciencia
al cotidiano instante
de abrir mis persianas
y despertar a la vida.
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jueves, 25 de agosto de 2011
Huellas
Suave como la ardiente arena de un desierto
tus pasos van moldeando las huellas
de un paisaje tibio
en un horizonte de extensiones
que se diluye con la brisa candente
en la geografía de tus aspiraciones
siguiendo la línea de tus desvelos
rescatando en el horizonte una tangente
que dibuje mi silueta
en el eje mismo del crepúsculo
en el que mi corazón late
las tempestades de un amor visceral
atravesando fronteras invisibles
como aves planeando
en las extensiones de mi universo
adonde mi alma
toma las formas de un espiral
que fluye como tempestad
hacia las órbitas de tus ansias
y exhalo de tu fragancia
el elixir que dirija tus pasos
hacia el centro mismo de mi corazón
donde te espero sin prisa
acumulando ternuras
como caricias tibias
que mis entrañas te ofrendan
en el universo palpitante
de mis emociones
esperanzada y cautiva
de ilusionado reencuentro.
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tus pasos van moldeando las huellas
de un paisaje tibio
en un horizonte de extensiones
que se diluye con la brisa candente
en la geografía de tus aspiraciones
siguiendo la línea de tus desvelos
rescatando en el horizonte una tangente
que dibuje mi silueta
en el eje mismo del crepúsculo
en el que mi corazón late
las tempestades de un amor visceral
atravesando fronteras invisibles
como aves planeando
en las extensiones de mi universo
adonde mi alma
toma las formas de un espiral
que fluye como tempestad
hacia las órbitas de tus ansias
y exhalo de tu fragancia
el elixir que dirija tus pasos
hacia el centro mismo de mi corazón
donde te espero sin prisa
acumulando ternuras
como caricias tibias
que mis entrañas te ofrendan
en el universo palpitante
de mis emociones
esperanzada y cautiva
de ilusionado reencuentro.
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El pasado sólo vuelve cuando el presente fluye tan armonioso como la superficie deslizante de un río profundo. Entonces se ve a través de la superficie deslizante de un río profundo. En esos momentos encuentro una de mis mayores satisfacciones, no en el hecho de estar pensando en el pasado, sino que es entonces cuando estoy viviendo el presente más intensamente. Virginia Woolf (Presente)
Fragilidad
Hoy el sol se ocultó
a la sombra de mi montaña
se opacó el alma de las flores
y perdí la ilusión del azul
los plateados descendieron
en forma de tenues grises
y un águila herida
planeaba su fragilidad
entre suspiros de escarcha
anidando su dolor
al amparo de mi alma.
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a la sombra de mi montaña
se opacó el alma de las flores
y perdí la ilusión del azul
los plateados descendieron
en forma de tenues grises
y un águila herida
planeaba su fragilidad
entre suspiros de escarcha
anidando su dolor
al amparo de mi alma.
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miércoles, 24 de agosto de 2011
En la cima del mundo
En la cima del mundo estoy,
reposando en el lomo
de la divinidad,
con mi ser levitando
hacia el mismo cielo,
explayada
como diosa pagana
ofrendada
a la seducción del universo.
Y escalé peldaños como rocas
orillando abismos de ausencias,
rescatando mis anhelos
de sueños inconclusos,
desolada estampa de mi fragilidad.
Y es en el eje de tanta desventura
que mi ser allanó mis emociones
alcanzando el camino de los sueños
y se elevó hacia una estela de luz
de un edén iluminado por la luna,
despejando mi horizonte del silencio,
entregada a la contemplación
de un sueño nuevo y protector
de ostentosa belleza,
como brisa de lirios
perfumando la órbita ascendente
de mi inmutable optimismo.
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reposando en el lomo
de la divinidad,
con mi ser levitando
hacia el mismo cielo,
explayada
como diosa pagana
ofrendada
a la seducción del universo.
Y escalé peldaños como rocas
orillando abismos de ausencias,
rescatando mis anhelos
de sueños inconclusos,
desolada estampa de mi fragilidad.
Y es en el eje de tanta desventura
que mi ser allanó mis emociones
alcanzando el camino de los sueños
y se elevó hacia una estela de luz
de un edén iluminado por la luna,
despejando mi horizonte del silencio,
entregada a la contemplación
de un sueño nuevo y protector
de ostentosa belleza,
como brisa de lirios
perfumando la órbita ascendente
de mi inmutable optimismo.
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martes, 23 de agosto de 2011
Beber de tu dolor
Enjugué tus lágrimas
en soledad,
construyendo
un estanque
de nenúferas
en los cimientos estériles
de tu melancolía,
lavando tu ser
de tu inmutable aflicción.
bebiendo de tu dolor,
como quien ofrenda
un elixir
y roba una sonrisa
al esplendor de la luna.
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en soledad,
construyendo
un estanque
de nenúferas
en los cimientos estériles
de tu melancolía,
lavando tu ser
de tu inmutable aflicción.
bebiendo de tu dolor,
como quien ofrenda
un elixir
y roba una sonrisa
al esplendor de la luna.
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Maduréz
Soy la línea delgada
de mis ojos
la visión transparente
de mi silueta
que se esfuma
por las retinas
resignadas
a la percepción inmutable
de este ser
que transmuta
en un tiempo implacable
de arrugas delineadas
en las comisuras
como máscaras acuñadas
por el rictus impasible
de la madurez.
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de mis ojos
la visión transparente
de mi silueta
que se esfuma
por las retinas
resignadas
a la percepción inmutable
de este ser
que transmuta
en un tiempo implacable
de arrugas delineadas
en las comisuras
como máscaras acuñadas
por el rictus impasible
de la madurez.
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Anhelos
A mi rostro
se le adhieren las lágrimas
efímeras
como lluvia de amaneceres
cuál máscara de piel
que dibuja
la textura de la melancolía
y una laguna de anhelos
se esfuma ante mis ojos
como pájaros de acero
buscando serenos
el camino del regreso.
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se le adhieren las lágrimas
efímeras
como lluvia de amaneceres
cuál máscara de piel
que dibuja
la textura de la melancolía
y una laguna de anhelos
se esfuma ante mis ojos
como pájaros de acero
buscando serenos
el camino del regreso.
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lunes, 22 de agosto de 2011
Decepción
Quise ser esa mujer,
amante fiel,
la que tu mirada esculpió
cual estatua viviente
dibujando lineas
de contornos tenues,
surcando horizontes
en praderas púrpuras,
entregada al placer
de la seducción,
amparada a la sombra
de tu universo de ternuras,
adonde nuestras siluetas
vestían sus pieles
al resplandor de la luna,
embriagados en besos,
exudados y exánimes,
emanando fragancias dulces
de un verano tibio.
Quise ser esa mujer,
tu amante fiel,
como doncella de ensueños
delineando tu horizonte de caricias,
robándome el paraíso
para ofrendártelo.
Mujer amante
en la vigilia de tus noches,
extraviada en tu esencia.
cautiva de tu universo.
La perfecta consorte
que entibie tus sábanas
sin codiciar promesas.
Quise serlo,
y en todas ellas
estoy ausente de ti.
Te devoraron las voraces llamas
de un crepúsculo de fuego
y quedó mi estampa pretenciosa
abrazada a las garras
de la decepción
como rocas de hielo,
naufragando su agonía
a la penumbra de mis sueños.
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amante fiel,
la que tu mirada esculpió
cual estatua viviente
dibujando lineas
de contornos tenues,
surcando horizontes
en praderas púrpuras,
entregada al placer
de la seducción,
amparada a la sombra
de tu universo de ternuras,
adonde nuestras siluetas
vestían sus pieles
al resplandor de la luna,
embriagados en besos,
exudados y exánimes,
emanando fragancias dulces
de un verano tibio.
Quise ser esa mujer,
tu amante fiel,
como doncella de ensueños
delineando tu horizonte de caricias,
robándome el paraíso
para ofrendártelo.
Mujer amante
en la vigilia de tus noches,
extraviada en tu esencia.
cautiva de tu universo.
La perfecta consorte
que entibie tus sábanas
sin codiciar promesas.
Quise serlo,
y en todas ellas
estoy ausente de ti.
Te devoraron las voraces llamas
de un crepúsculo de fuego
y quedó mi estampa pretenciosa
abrazada a las garras
de la decepción
como rocas de hielo,
naufragando su agonía
a la penumbra de mis sueños.
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domingo, 21 de agosto de 2011
Sueños envasados
Mis sueños se comprimen
al tamaño de los envases,
algunos se expanden
más allá de mi cielo,
otros trasnochan sus horas
en pequeñas burbujas,
o tal vez echan a rodar
como círculos volátiles
en laderas lustrosas,
o puede que vuelen
como gaviotas,
levitando en el firmamento.
Están los sueños transitorios
que se esfuman al alba
ahogados en sí mismos.
O los periféricos
que se ciñen a mi cintura
con cada amanecer
y potencian proyectos a corto plazo.
O los imposibles
que gravitan en universos ajenos
como ánimas trasnochadas.
O esos sueños rotos
que perecen con la decepción
antes de desplegar sus alas.
Así de coloridos son mis sueños,
abrazan distintos tamaños
y se expanden
como anhelos inconclusos,
flotando mi ser en la búsqueda
de infinita ambición,
como rocío de esperanzas
que despiertan mi codicia
de capturarlos al alba
con las fragancias del universo.
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al tamaño de los envases,
algunos se expanden
más allá de mi cielo,
otros trasnochan sus horas
en pequeñas burbujas,
o tal vez echan a rodar
como círculos volátiles
en laderas lustrosas,
o puede que vuelen
como gaviotas,
levitando en el firmamento.
Están los sueños transitorios
que se esfuman al alba
ahogados en sí mismos.
O los periféricos
que se ciñen a mi cintura
con cada amanecer
y potencian proyectos a corto plazo.
O los imposibles
que gravitan en universos ajenos
como ánimas trasnochadas.
O esos sueños rotos
que perecen con la decepción
antes de desplegar sus alas.
Así de coloridos son mis sueños,
abrazan distintos tamaños
y se expanden
como anhelos inconclusos,
flotando mi ser en la búsqueda
de infinita ambición,
como rocío de esperanzas
que despiertan mi codicia
de capturarlos al alba
con las fragancias del universo.
Elbi (Derechos reservados)
Como ser humano soy una especie de antología de contradicciones, de gaffes, de errores, pero tengo sentido ético. Esto no quiere decir que yo obre mejor que otros, sino simplemente que trato de obrar bien y no espero castigo ni recompensa. Que soy, digamos, insignificante, es decir, indigno de dos cosas; el cielo y el infierno me quedan muy grandes. Jorge Luis Borges
sábado, 20 de agosto de 2011
Te extraño
Extraño tu manera
idílica de amarme
la forma sutil
de enredar mis cabellos
y acercar tu rostro
como un suspiro
sostenido en la ternura
extraño tu silencio
con aroma a lirios
mientras tus ojos dibujan
serpentinas en mi rostro
y eres capáz de decirlo todo
sin mediar palabra
extraño tu sonrisa encendida
ahuecando un espacio en mi alma
tus dedos finos
penetrando mi universo
en el umbral de mis ansias
con la luna reflejando
el círculo perfecto
de nuestras siluetas
al límite candente
de nuestra efervescencia.
Elbi (Derechos reservados)
idílica de amarme
la forma sutil
de enredar mis cabellos
y acercar tu rostro
como un suspiro
sostenido en la ternura
extraño tu silencio
con aroma a lirios
mientras tus ojos dibujan
serpentinas en mi rostro
y eres capáz de decirlo todo
sin mediar palabra
extraño tu sonrisa encendida
ahuecando un espacio en mi alma
tus dedos finos
penetrando mi universo
en el umbral de mis ansias
con la luna reflejando
el círculo perfecto
de nuestras siluetas
al límite candente
de nuestra efervescencia.
Elbi (Derechos reservados)
jueves, 18 de agosto de 2011
Estaciones del alma
Los cuartos vacíos
son como las estaciones del alma,
ocultan bajo sus alas
el perfume de un pasado
que regresa a besarme la mejilla.
Acaso los anhelos de una vida
se reflejan en el rostro
con sutiles ranuras de añoranza,
o acaso mis iris refracten
el mosaico de vivencias
que edificaron mi existir
a la singular sensación
de envejecer en plenitud.
Una foto del pasado
me enfrenta a la visión
de la mujer joven que fui,
e intento penetrar
mis pensamientos de entonces,
presumiendo
que son casi idénticos en su esencia,
a este presente que me arrulla.
Somos dos en una
en una misma evolución,
como queriendo compartir
cuartos mágicos
de intensa luz,
en exquista armonía con mi ser.
Elbi
son como las estaciones del alma,
ocultan bajo sus alas
el perfume de un pasado
que regresa a besarme la mejilla.
Acaso los anhelos de una vida
se reflejan en el rostro
con sutiles ranuras de añoranza,
o acaso mis iris refracten
el mosaico de vivencias
que edificaron mi existir
a la singular sensación
de envejecer en plenitud.
Una foto del pasado
me enfrenta a la visión
de la mujer joven que fui,
e intento penetrar
mis pensamientos de entonces,
presumiendo
que son casi idénticos en su esencia,
a este presente que me arrulla.
Somos dos en una
en una misma evolución,
como queriendo compartir
cuartos mágicos
de intensa luz,
en exquista armonía con mi ser.
Elbi
miércoles, 17 de agosto de 2011
Fantasías
Mi vida se pacta
en fantasías
de alto voltaje.
Si fijo mi vista,
está dirigida
a un punto
entre el espacio
que me contiene
y el camino liso e inmóvil
que transito
con pasos silenciosos,
descalzos en el fango,
descansando invisible
en cautivantes sueños,
adonde sería más fácil llegar
y teñirme con los colores
de la frivolidad,
sosteniendo la risa y la ironía
como caldos corrientes
de los que puedo prescindir,
si es que así lo decido,
o moldear mi paisaje de regreso
a un mullido colchón
de sueños ensoñados
que laven
lo endiabladamente loco y ficticio
que dejé en el camino,
sostenerme en los soportes
de ese arrullo
y soñar con fábulas, que no son tales
si es que mi propósito de alcanzarlas
es vehemente y febril.
Soñar despierta
bañada en metáforas
y contemplar como la luna
se explaya al alba
y besa apasionada
su último beso enamorado.
Despabilando mi espíritu
al abrigo de la meditación
adonde mi inspiración
reposa embriagada
su apasionada fascinación.
Elbi (Derechos reservados)
en fantasías
de alto voltaje.
Si fijo mi vista,
está dirigida
a un punto
entre el espacio
que me contiene
y el camino liso e inmóvil
que transito
con pasos silenciosos,
descalzos en el fango,
descansando invisible
en cautivantes sueños,
adonde sería más fácil llegar
y teñirme con los colores
de la frivolidad,
sosteniendo la risa y la ironía
como caldos corrientes
de los que puedo prescindir,
si es que así lo decido,
o moldear mi paisaje de regreso
a un mullido colchón
de sueños ensoñados
que laven
lo endiabladamente loco y ficticio
que dejé en el camino,
sostenerme en los soportes
de ese arrullo
y soñar con fábulas, que no son tales
si es que mi propósito de alcanzarlas
es vehemente y febril.
Soñar despierta
bañada en metáforas
y contemplar como la luna
se explaya al alba
y besa apasionada
su último beso enamorado.
Despabilando mi espíritu
al abrigo de la meditación
adonde mi inspiración
reposa embriagada
su apasionada fascinación.
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martes, 16 de agosto de 2011
Susurros huecos
Obstinado intento
de perfilar una idea
en equilibrio con mi ser
que hoy me regale
las proporciones exactas
de la felicidad
buscando respuestas
en silencios estancados
en una apasible sonoridad
de susurros
como emociones tenues
de este horizonte
que se expande
hacia un infinito
robándome
un paraíso de ilusiones
en la serena quietud
de esta habitación
en penumbras.
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de perfilar una idea
en equilibrio con mi ser
que hoy me regale
las proporciones exactas
de la felicidad
buscando respuestas
en silencios estancados
en una apasible sonoridad
de susurros
como emociones tenues
de este horizonte
que se expande
hacia un infinito
robándome
un paraíso de ilusiones
en la serena quietud
de esta habitación
en penumbras.
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Sueños
Soñemos juntos
a la velocidad del viento
reclinados a la luz del sol
encandilados
en nuestras ilusiones
soñemos con codicia
y sin pudor
elevando
nuestras aspiraciones
hacía la cima máxima
de nuestras expectativas.
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a la velocidad del viento
reclinados a la luz del sol
encandilados
en nuestras ilusiones
soñemos con codicia
y sin pudor
elevando
nuestras aspiraciones
hacía la cima máxima
de nuestras expectativas.
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Perlas
Bellísimas perlas, puedo suponer que son globos de nácar, así se entrelazan mis emociones, así mis pensamientos se engarzan como una cadena que me hace sentir presa de mi misma y de mis circunstancias. Qué presuntuosa irracionalidad si pudiese alterar ese equilibrio, entonces una perla cae, y otra sigue el mismo ritmo de cadencia, y se percibe la libertad que el propio misterio de esa caída le confiere a mi vida en esta instancia del ser, como ilusiones que se proyectan más allá de mis sueños, como un collar de perlas resplandeciendo en la oscuridad.
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lunes, 15 de agosto de 2011
Postal en blanco y negro
Mi alma se reclina
ante la visión del blanco y negro
en la opacidad de un edén
adonde las luces irradian
un esplendor de sombras
que toman formas reales
de una naturaleza
que mama de sí misma
su propia perfección
a pesar de la turbiedad
que no altera la belleza
de estos días invernales
nevados y candentes
proyectándose mi sombra
en la extensa visibilidad
de una postal
traslúcida de matices
en la que mi ser se embriaga
en los opacos
que palpitan en mi interior
con igual magnificencia
de jactancioso color.
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ante la visión del blanco y negro
en la opacidad de un edén
adonde las luces irradian
un esplendor de sombras
que toman formas reales
de una naturaleza
que mama de sí misma
su propia perfección
a pesar de la turbiedad
que no altera la belleza
de estos días invernales
nevados y candentes
proyectándose mi sombra
en la extensa visibilidad
de una postal
traslúcida de matices
en la que mi ser se embriaga
en los opacos
que palpitan en mi interior
con igual magnificencia
de jactancioso color.
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Atrévete
Atrévete a renunciar
a la insustancial idea
de vivir a la sombra
de los recuerdos,
a morir lentamente
con la ausencia del consuelo
y el exterminio de la tristeza.
Atrévete antes del alba
a ignorar los latidos
de tu virilidad
en el desafío
de enfrentar la soledad
y sucumbir a tu aflicción.
Atrévete a soñar
y al despertar
dibujar mi rostro
en el lienzo de tu melancolía.
Atrévete a evocarme
sin derrochar nostalgia,
naufragando
en la órbita del crepúsculo
con mi pasión
devorándote el corazón.
Atrévete a convivir
con los despojos
del pesimismo,
construyendo edificios
en plataformas vulnerables,
desahuciado de caricias,
solitario de ilusiones.
Atrévete a perpetuarte
al paralelo de mi vida
confrontando la idea del silencio
vestimenta de cristal
que tendrás que exhibir
a expensas de ti mismo.
Atrévete amor
a sobrevivir a la apatía,
a la nostalgia
y al llanto.
Atrévete a vivir sin mi!
Elbi
a la insustancial idea
de vivir a la sombra
de los recuerdos,
a morir lentamente
con la ausencia del consuelo
y el exterminio de la tristeza.
Atrévete antes del alba
a ignorar los latidos
de tu virilidad
en el desafío
de enfrentar la soledad
y sucumbir a tu aflicción.
Atrévete a soñar
y al despertar
dibujar mi rostro
en el lienzo de tu melancolía.
Atrévete a evocarme
sin derrochar nostalgia,
naufragando
en la órbita del crepúsculo
con mi pasión
devorándote el corazón.
Atrévete a convivir
con los despojos
del pesimismo,
construyendo edificios
en plataformas vulnerables,
desahuciado de caricias,
solitario de ilusiones.
Atrévete a perpetuarte
al paralelo de mi vida
confrontando la idea del silencio
vestimenta de cristal
que tendrás que exhibir
a expensas de ti mismo.
Atrévete amor
a sobrevivir a la apatía,
a la nostalgia
y al llanto.
Atrévete a vivir sin mi!
Elbi
domingo, 14 de agosto de 2011
Amame en la claridad
Amame en la claridad,
con tu mirada sostenida
dibujando los pliegues de mi piel
a la luz de mis inhibiciones.
Amame en mi extensión,
ahogando mis suspiros
en esta habitación en llamas,
con nuestros cuerpos
irradiando luminosidad,
como un crepúsculo
delineando mi horizonte.
Amame sin pudor y con codicia,
con la fresca fragancia del placer,
explayado en la contemplación
de este paisaje sensual y volátil.
Amame atrapando en tu mirada
el marco de mis imperfecciones,
bebiendo de mi esencia
la hermosura
que tus ojos me ofrendan.
Amame sin decoro,
pactando los desatinos
de este amor al borde
de la irracionalidad,
embriagado en tu propia insensatez,
que a la luz de esta nitidéz,
nuestras siluetas
flamean su tersura
al candente resplandor del sol.
Elbi ( Derechos reservados)
Imagen escultórica de la genial escultora francesa Camille Claudel.
con tu mirada sostenida
dibujando los pliegues de mi piel
a la luz de mis inhibiciones.
Amame en mi extensión,
ahogando mis suspiros
en esta habitación en llamas,
con nuestros cuerpos
irradiando luminosidad,
como un crepúsculo
delineando mi horizonte.
Amame sin pudor y con codicia,
con la fresca fragancia del placer,
explayado en la contemplación
de este paisaje sensual y volátil.
Amame atrapando en tu mirada
el marco de mis imperfecciones,
bebiendo de mi esencia
la hermosura
que tus ojos me ofrendan.
Amame sin decoro,
pactando los desatinos
de este amor al borde
de la irracionalidad,
embriagado en tu propia insensatez,
que a la luz de esta nitidéz,
nuestras siluetas
flamean su tersura
al candente resplandor del sol.
Elbi ( Derechos reservados)
Imagen escultórica de la genial escultora francesa Camille Claudel.
sábado, 13 de agosto de 2011
Plenitud
Al reflejarme en tus iris,
desnudo mi esencia
a través de tu visión,
buceando en esferas
de indestructible armonía,
peregrinando en silencio
el horizonte de mis sueños,
pincelados mis contornos
con la gama de la armonía,
ondeando apacible
en océanos diáfanos,
como un cardenal de mar
flotando en burbujas de liviandad,
embebida de este paisaje tibio
que pincela mi desnudez
con el pico de una gaviota,
diluyéndome
en un cuadro surrealista
de lustrosa textura,
expuesta a la visión del universo,
cuando es tu hechizo
el que me ofrenda
esta nueva y pletórica
imagen de mi misma,
levitando en este edén
que son tus ojos,
extraviándome
en la contemplación
de sustancial resplandor.
Elbi (Derechos reservados)
desnudo mi esencia
a través de tu visión,
buceando en esferas
de indestructible armonía,
peregrinando en silencio
el horizonte de mis sueños,
pincelados mis contornos
con la gama de la armonía,
ondeando apacible
en océanos diáfanos,
como un cardenal de mar
flotando en burbujas de liviandad,
embebida de este paisaje tibio
que pincela mi desnudez
con el pico de una gaviota,
diluyéndome
en un cuadro surrealista
de lustrosa textura,
expuesta a la visión del universo,
cuando es tu hechizo
el que me ofrenda
esta nueva y pletórica
imagen de mi misma,
levitando en este edén
que son tus ojos,
extraviándome
en la contemplación
de sustancial resplandor.
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Amándonos
Que miras cuando me miras
que no hay universo mayor
que el de tus ojos.
Y soy esta mujer
que tu recorres
con sutil armonía.
Y ya no se ni quien soy
ni en que lugar del paraíso estoy.
Tal vez un suspiro,
un anhelo,
un beso tuyo
bebiendo de mis labios,
que sedientos
reclaman más de vos,
más de mi misma,
la mujer que fui y que perdí
en un instante de melancolía.
Y tus dedos finos
de amante generoso
dibujan una y otra vez mi silueta
esculpiendo edificios de fantasías
que desbordan mi ser extraviado
en un solo orgasmo
intenso y bullicioso,
que no me alcanza mi amor
porque escucho de tus labios
susurros de más caricias.
Y cae una lágrima
que augura
que nuestro tiempo se desvanece.
Aún así, me besas con tanta dulzura.
Elbi (Derechos reservados)
que no hay universo mayor
que el de tus ojos.
Y soy esta mujer
que tu recorres
con sutil armonía.
Y ya no se ni quien soy
ni en que lugar del paraíso estoy.
Tal vez un suspiro,
un anhelo,
un beso tuyo
bebiendo de mis labios,
que sedientos
reclaman más de vos,
más de mi misma,
la mujer que fui y que perdí
en un instante de melancolía.
Y tus dedos finos
de amante generoso
dibujan una y otra vez mi silueta
esculpiendo edificios de fantasías
que desbordan mi ser extraviado
en un solo orgasmo
intenso y bullicioso,
que no me alcanza mi amor
porque escucho de tus labios
susurros de más caricias.
Y cae una lágrima
que augura
que nuestro tiempo se desvanece.
Aún así, me besas con tanta dulzura.
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Invisible
Me esfumo irremediablemente
ante mi propia visión
enfrentando un espejo
adonde mi imagen se refracta
y soy mil rostros en uno
buscando el centro de mi ser
en las esferas vacías
conque mis ojos
se ufanan
de esta bruma existencial
estacionados serenos
en esta quietud llamada indiferencia
como ceguera de utopías
que la luz del cristal
no logra opacar
claudicando a la idea
de ser visible
aún en mi vulnerabilidad.
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ante mi propia visión
enfrentando un espejo
adonde mi imagen se refracta
y soy mil rostros en uno
buscando el centro de mi ser
en las esferas vacías
conque mis ojos
se ufanan
de esta bruma existencial
estacionados serenos
en esta quietud llamada indiferencia
como ceguera de utopías
que la luz del cristal
no logra opacar
claudicando a la idea
de ser visible
aún en mi vulnerabilidad.
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Soberbia
Quiero trascender
a la volátil presunción
de sentirme
el centro
del universo,
pincelando mi arrogancia
con matices de autenticidad ,
circunscribiendo
mis ideas
a un plano de realidad,
sin pautas
que rompan
los equilibrios ficticios
que le impuse
a mi soberbia,
elevándome
de mis propios fracasos
sin tules o humaredas
que empañen
mi visión
de la simplicidad,
fabricándome sueños
en equilibrio con mis perspectivas.
Retornando al fin a mi morada.
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a la volátil presunción
de sentirme
el centro
del universo,
pincelando mi arrogancia
con matices de autenticidad ,
circunscribiendo
mis ideas
a un plano de realidad,
sin pautas
que rompan
los equilibrios ficticios
que le impuse
a mi soberbia,
elevándome
de mis propios fracasos
sin tules o humaredas
que empañen
mi visión
de la simplicidad,
fabricándome sueños
en equilibrio con mis perspectivas.
Retornando al fin a mi morada.
Elbi (Derechos reservados)
viernes, 12 de agosto de 2011
Insomnio
Es que acaso la luna
se encogió en mis retinas
y la noche se alargó
en un horizonte borroso
plagado de sombras
trasnochadas
que danzan los acordes
de sus letanías
extraviadas en las cavidades
de mis sueños
que ya no sé si son extensiones
de mis fantasías
o es mi propia vigilia
exprimiendo de mi esencia
los residuos locos de mi sin razón
como una ficción
proyectándose
en una pendiente de utopías
tejiendo estos versos desprolijos
producto de un insomnio
que envuelve a mi conciencia
con los pliegues de la insensatez
extravíándome
en un universo transitorio
del que me embriago
en excitante frenesí
en una instancia previa a la cordura.
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se encogió en mis retinas
y la noche se alargó
en un horizonte borroso
plagado de sombras
trasnochadas
que danzan los acordes
de sus letanías
extraviadas en las cavidades
de mis sueños
que ya no sé si son extensiones
de mis fantasías
o es mi propia vigilia
exprimiendo de mi esencia
los residuos locos de mi sin razón
como una ficción
proyectándose
en una pendiente de utopías
tejiendo estos versos desprolijos
producto de un insomnio
que envuelve a mi conciencia
con los pliegues de la insensatez
extravíándome
en un universo transitorio
del que me embriago
en excitante frenesí
en una instancia previa a la cordura.
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Cristales rotos
He vuelto de mares de locura
siguiendo la huella de mis sueños,
y mi alma perece
en el afán de alcanzar
lo que de tu ser se desprende,
reviviendo caricias
pegadas a mi piel
como un estigma,
porque de ti adolezco
con cada amanecer.
como un misterio
de entre todos los enigmas,
como la nostalgia
de un tiempo perdido
y una lágrima tenue
que se evapora,
como si no te hubieses ido
y tu silueta es la rutina de mis días,
o la inspiración
que construye metáforas
en páginas vacías,
como esta mujer en fragmentos
que tu soberbia no supo ver,
cual ciego en la oscuridad,
a pesar del sol,
de la montaña
y el río,
a pesar de tí mismo
y esos solitarios y dorados caminos
que cautivarán nuestros sentidos,
recorriéndolos de otras manos
y otras ilusiones
que no serán las tuyas ni las mías,
solo sueños de otra vida
que aprenderemos a recorrer
sin dar marcha atrás.
Sin que una lágrima
desdibuje la hermosura.
Elbi (Derechos reservados)
siguiendo la huella de mis sueños,
y mi alma perece
en el afán de alcanzar
lo que de tu ser se desprende,
reviviendo caricias
pegadas a mi piel
como un estigma,
porque de ti adolezco
con cada amanecer.
como un misterio
de entre todos los enigmas,
como la nostalgia
de un tiempo perdido
y una lágrima tenue
que se evapora,
como si no te hubieses ido
y tu silueta es la rutina de mis días,
o la inspiración
que construye metáforas
en páginas vacías,
como esta mujer en fragmentos
que tu soberbia no supo ver,
cual ciego en la oscuridad,
a pesar del sol,
de la montaña
y el río,
a pesar de tí mismo
y esos solitarios y dorados caminos
que cautivarán nuestros sentidos,
recorriéndolos de otras manos
y otras ilusiones
que no serán las tuyas ni las mías,
solo sueños de otra vida
que aprenderemos a recorrer
sin dar marcha atrás.
Sin que una lágrima
desdibuje la hermosura.
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Escultor
Recorro tus valles
modelando tibiamente
tus contornos
concentrado en no dejar ranuras
bordeo tus hombros
hasta las axilas
me impregno de tu aliento
y sigo el camino de tus laderas
que suavemente
voy contorneando
hacia esos montes lustrosos
que son tus pechos
de los que bebo
como frenético escultor
de la perfección
subiendo mis ansias
a los botones de tu femineidad
irguiéndose armoniosa
a mi manipulación
y voy descendiendo
por líneas curvas
reprimiendo mi éxtasis
un instante más
explayándome por las hendiduras
de tu voluptuosidad
arrobado
en la contemplación
de tus delicados muslos
que atesoran tu ser de mujer
en un monte sedoso
que exploro con mis manos tibias
bebiendo finalmente
de tus dulces vertientes
en un último aliento de cordura.
Para aspirar finalmente al paraíso!
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modelando tibiamente
tus contornos
concentrado en no dejar ranuras
bordeo tus hombros
hasta las axilas
me impregno de tu aliento
y sigo el camino de tus laderas
que suavemente
voy contorneando
hacia esos montes lustrosos
que son tus pechos
de los que bebo
como frenético escultor
de la perfección
subiendo mis ansias
a los botones de tu femineidad
irguiéndose armoniosa
a mi manipulación
y voy descendiendo
por líneas curvas
reprimiendo mi éxtasis
un instante más
explayándome por las hendiduras
de tu voluptuosidad
arrobado
en la contemplación
de tus delicados muslos
que atesoran tu ser de mujer
en un monte sedoso
que exploro con mis manos tibias
bebiendo finalmente
de tus dulces vertientes
en un último aliento de cordura.
Para aspirar finalmente al paraíso!
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Tributo al amor
Efímera,
sin nada
que pueda sustentar
más que mi pena
que se asemeja
a esos pájaros heridos
destinados al olvido,
extraviada en tu silencio
y árida de caricias suaves
adheridas a mi piel,
como membranas sutiles
refractando tu silueta
que se fuga en mis anhelos,
desandando nostalgias,
adonde el recuerdo
se funde en tu horizonte,
como metal candente
palpando mi corazón,
con la finura de tus dedos
exclamando dulcemente:
"sos una mujer hermosa de acá,"
y tu mano se deslizaba de mi cabeza
a mi pecho,
adonde anidan mis emociones.
Y puedo recrear aún
tus susurros besando mi alma:
"gracias por todo lo que me das,"
susurrabas con emoción,
moldeando una almohada
de ternuras que fluyen
más allá de mis sueños,
ahuecando un espacio en tu pecho,
reposando
del dulce cansancio del amor,
inclinados tus ojos a mis órbitas,
reproduciendo esa frase que te definía:
Quién amor?
quién te quiere más que yo?
Elbi (Derechos reservados)
sin nada
que pueda sustentar
más que mi pena
que se asemeja
a esos pájaros heridos
destinados al olvido,
extraviada en tu silencio
y árida de caricias suaves
adheridas a mi piel,
como membranas sutiles
refractando tu silueta
que se fuga en mis anhelos,
desandando nostalgias,
adonde el recuerdo
se funde en tu horizonte,
como metal candente
palpando mi corazón,
con la finura de tus dedos
exclamando dulcemente:
"sos una mujer hermosa de acá,"
y tu mano se deslizaba de mi cabeza
a mi pecho,
adonde anidan mis emociones.
Y puedo recrear aún
tus susurros besando mi alma:
"gracias por todo lo que me das,"
susurrabas con emoción,
moldeando una almohada
de ternuras que fluyen
más allá de mis sueños,
ahuecando un espacio en tu pecho,
reposando
del dulce cansancio del amor,
inclinados tus ojos a mis órbitas,
reproduciendo esa frase que te definía:
Quién amor?
quién te quiere más que yo?
Elbi (Derechos reservados)
Veladura
Velos en mis ojos
como ángeles
que pierden sus alas
y desfallecen
a la sombra de mis pupilas
y queda su vuelo
suspendido
entre el dolor y la fragilidad
por el peso de la pena
de una herida abierta
sangrando por las vertientes
de un corazón vacío...
Elbi (Derechos reservados)
como ángeles
que pierden sus alas
y desfallecen
a la sombra de mis pupilas
y queda su vuelo
suspendido
entre el dolor y la fragilidad
por el peso de la pena
de una herida abierta
sangrando por las vertientes
de un corazón vacío...
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Apatía
Mi visión
es mi horizonte
adonde
se circunscriben
mis sueños
que hoy
descansan
en los contornos
de una estalactita
que creció punzante
en las entrañas
de un abismo
que gotea
su escarcha
en el centro mismo
de mi apatía.
Elbi (Derechos reservados)
es mi horizonte
adonde
se circunscriben
mis sueños
que hoy
descansan
en los contornos
de una estalactita
que creció punzante
en las entrañas
de un abismo
que gotea
su escarcha
en el centro mismo
de mi apatía.
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Silencios
Me ufané
de mi verborragia
poniendo entre paréntesis
mis silencios
socavados
estériles
hoy el tiempo
me los devuelve
intactos
en un regazo de tibiezas
entre susurros suaves
como suspiro otoñal
reposando
su cadencioso mutismo
en las cavidades
de esta soledad
elegida y sostenida
residente invisible
de mi morada.
Elbi (Derechos reservados)
de mi verborragia
poniendo entre paréntesis
mis silencios
socavados
estériles
hoy el tiempo
me los devuelve
intactos
en un regazo de tibiezas
entre susurros suaves
como suspiro otoñal
reposando
su cadencioso mutismo
en las cavidades
de esta soledad
elegida y sostenida
residente invisible
de mi morada.
Elbi (Derechos reservados)
Dormir a tu lado
Exhausta en tus brazos,
apoyé mi mejilla
en tu hombro,
y mis cabellos
cayeron lánguidos
sobre la almohada tibia,
de una paz serena
que me sedujo al punto
de quedarme dormida.
Fueron minutos
en los que mi respiración
se agitaba plácida y lenta
como una burbuja de miel,
y viví un instante de felicidad
por esa caricia dulce
que acunaba mi sueño,
y sin pretenderlo
tus ojos se cerraron
al unísono con los míos.
Era la paz del amor
que nos regalaba
el delicioso murmullo
de un sueño compartido,
tan exquisito,
tan diáfano.
Amor mío!
Elbi (Derechos reservados)
apoyé mi mejilla
en tu hombro,
y mis cabellos
cayeron lánguidos
sobre la almohada tibia,
de una paz serena
que me sedujo al punto
de quedarme dormida.
Fueron minutos
en los que mi respiración
se agitaba plácida y lenta
como una burbuja de miel,
y viví un instante de felicidad
por esa caricia dulce
que acunaba mi sueño,
y sin pretenderlo
tus ojos se cerraron
al unísono con los míos.
Era la paz del amor
que nos regalaba
el delicioso murmullo
de un sueño compartido,
tan exquisito,
tan diáfano.
Amor mío!
Elbi (Derechos reservados)
Retrátame
Retrátame
con el color de tus ojos
y la desmesura de tu mirada
con los contornos de tu rostro
y la magnificencia de tu sonrisa
con tus mejillas finas
y tu frente amplia
con tu mirada
sostenida y viril
con tu ardiente seducción
desbordando los confines
de mi insensatez
entregada a tu abrazo
poderoso y sensual
apasionado y loco .
Retrátame con tus gestos
con tus emociones
con tu aura
con tu humanidad.
Entonces colgaré tu retrato
frente a la soledad de mi lecho
y al candor de la noche
me veré reflejada
a través del cristal
con que tus ojos me pincelen.
Elbi (Derechos reservados)
con el color de tus ojos
y la desmesura de tu mirada
con los contornos de tu rostro
y la magnificencia de tu sonrisa
con tus mejillas finas
y tu frente amplia
con tu mirada
sostenida y viril
con tu ardiente seducción
desbordando los confines
de mi insensatez
entregada a tu abrazo
poderoso y sensual
apasionado y loco .
Retrátame con tus gestos
con tus emociones
con tu aura
con tu humanidad.
Entonces colgaré tu retrato
frente a la soledad de mi lecho
y al candor de la noche
me veré reflejada
a través del cristal
con que tus ojos me pincelen.
Elbi (Derechos reservados)
Al reverso de la pena
Cómo comienzo el día
sin una ilusión que me ampare,
enfrentando un vacío que conozco
porque lo he dibujado
y una laguna de carencias
porque las he sentido
reptando por mi piel.
Cómo salgo de mis aposentos
sin que mis manos sean rocas
y mi energía se contagie
de mis propias heridas?
Cómo camino con esta fatiga
sin que mis pasos leviten
al ritmo de mi pena?
Cómo reconozco mi rostro
lánguido de espera y de llanto?
Cómo me alimento
si mis entrañas son solo nudos
adonde gravita el dolor?
Cómo salgo a la calle
y enfrento el frenesí
de un universo en tránsito,
percibiendo la palidez de esta piel
que a la luz del sol
refracta el curso de mi amargura?.
Cómo me hago invisible
y me convierto en hija del silencio
arrastrando heridas como estigmas,
reposando a la sombra de un árbol
que me ampare de la tristeza?.
Vale la pena el esfuerzo
de transitar desventuras
que al otro le son ajenas?
Son acaso en vano mis lágrimas
si buscan consuelo en mi propio dolor?
Y si es así y las heridas son autoinfligidas
y el horizonte de mi pena
se ahoga en soledad?
Que sentido tiene amarte
en un espacio que no nos cobija a ambos,
provocando rupturas que solo a mi me hieren.
Es lúcido y no absurdo que mis sueños
recobren su horizonte?
Que mis lágrimas fraguen
por el destino que yo decido darles,
de retornar a mis aposentos
y comenzar de nuevo el día
"al reverso de la pena".
Me visto,
salgo a la calle,
me devoro el sol,
me mezclo con el júbilo,
enfrento las miradas,
y duermo la siesta bajo la sombra de un árbol
protegida por mi propia dignidad,
observando como el mundo gira a mi alrededor.
Elbi (Derechos reservados)
sin una ilusión que me ampare,
enfrentando un vacío que conozco
porque lo he dibujado
y una laguna de carencias
porque las he sentido
reptando por mi piel.
Cómo salgo de mis aposentos
sin que mis manos sean rocas
y mi energía se contagie
de mis propias heridas?
Cómo camino con esta fatiga
sin que mis pasos leviten
al ritmo de mi pena?
Cómo reconozco mi rostro
lánguido de espera y de llanto?
Cómo me alimento
si mis entrañas son solo nudos
adonde gravita el dolor?
Cómo salgo a la calle
y enfrento el frenesí
de un universo en tránsito,
percibiendo la palidez de esta piel
que a la luz del sol
refracta el curso de mi amargura?.
Cómo me hago invisible
y me convierto en hija del silencio
arrastrando heridas como estigmas,
reposando a la sombra de un árbol
que me ampare de la tristeza?.
Vale la pena el esfuerzo
de transitar desventuras
que al otro le son ajenas?
Son acaso en vano mis lágrimas
si buscan consuelo en mi propio dolor?
Y si es así y las heridas son autoinfligidas
y el horizonte de mi pena
se ahoga en soledad?
Que sentido tiene amarte
en un espacio que no nos cobija a ambos,
provocando rupturas que solo a mi me hieren.
Es lúcido y no absurdo que mis sueños
recobren su horizonte?
Que mis lágrimas fraguen
por el destino que yo decido darles,
de retornar a mis aposentos
y comenzar de nuevo el día
"al reverso de la pena".
Me visto,
salgo a la calle,
me devoro el sol,
me mezclo con el júbilo,
enfrento las miradas,
y duermo la siesta bajo la sombra de un árbol
protegida por mi propia dignidad,
observando como el mundo gira a mi alrededor.
Elbi (Derechos reservados)
Efervescencia
Nunca me amaron así
en la penumbra
de una habitación
a ciegas
como estallido
de volcanes
y fiebre
de verano enardecida
dibujando mi figura
con tus dedos
como puñales de fuego
que no hieren mi piel
ni la vulneran
con tus labios
diluyéndose en los míos
que dibujan
mi universo
bordeando los límites
de este ser entregado
y transgresor
donde no hay paraíso
fuera de mi misma
que desee frenar
tus desvaríos.
Elbi (Derechos reservados)
en la penumbra
de una habitación
a ciegas
como estallido
de volcanes
y fiebre
de verano enardecida
dibujando mi figura
con tus dedos
como puñales de fuego
que no hieren mi piel
ni la vulneran
con tus labios
diluyéndose en los míos
que dibujan
mi universo
bordeando los límites
de este ser entregado
y transgresor
donde no hay paraíso
fuera de mi misma
que desee frenar
tus desvaríos.
Elbi (Derechos reservados)
Quise ser princesa
No quise ser reina,
quise ser princesa,
como en los cuentos,
quise ser la buena,
eterna figura
de difusos sueños,
efímeros,
como estrellas fugaces
que en noches sin luna
resplandecen con la brisa
y caen como lluvia de ensueños
sobre mis ojos
que capturan nostalgias
de vidas pretéritas.
Princesa de un cuento de terror
con final bueno,
como epílogo
de mis fantasías más extravagantes.
Así, liviana,
descanso en un valle de arena y sol.
Elbi (Derechos reservados)
quise ser princesa,
como en los cuentos,
quise ser la buena,
eterna figura
de difusos sueños,
efímeros,
como estrellas fugaces
que en noches sin luna
resplandecen con la brisa
y caen como lluvia de ensueños
sobre mis ojos
que capturan nostalgias
de vidas pretéritas.
Princesa de un cuento de terror
con final bueno,
como epílogo
de mis fantasías más extravagantes.
Así, liviana,
descanso en un valle de arena y sol.
Elbi (Derechos reservados)
jueves, 11 de agosto de 2011
Circunstancia
Soy como la brisa,
apenas un suspiro
agonizando en una esfera.
Como un pájaro herido
en una jaula vacía.
Un paisaje nocturno
esfumándose en la niebla.
Una lágrima suspendida
como un cristal inerte.
Un reloj sin horas
reposando sus días
en la monotonía
de la trivialidad.
Un devenir sin tiempo.
Una flor mustia en un estanque.
Una vida que expira
en el acaso y en el quizás.
Un crepúsculo
sin la linea del horizonte.
Un atajo con salida hacia la nada.
El fluir de una cascada
por las vertientes
de un destino incierto.
Como un eclipse desfasado
reposando a la sombra inmutable
de mis circunstancias.
Elbi (Derechos reservados)
apenas un suspiro
agonizando en una esfera.
Como un pájaro herido
en una jaula vacía.
Un paisaje nocturno
esfumándose en la niebla.
Una lágrima suspendida
como un cristal inerte.
Un reloj sin horas
reposando sus días
en la monotonía
de la trivialidad.
Un devenir sin tiempo.
Una flor mustia en un estanque.
Una vida que expira
en el acaso y en el quizás.
Un crepúsculo
sin la linea del horizonte.
Un atajo con salida hacia la nada.
El fluir de una cascada
por las vertientes
de un destino incierto.
Como un eclipse desfasado
reposando a la sombra inmutable
de mis circunstancias.
Elbi (Derechos reservados)
Piel de mujer
Presumo de la niña
de espejos antiguos,
y esta mujer de hoy,
aliada invisible de mis días,
tallada a través
del cristal de mis ojos,
sobreviviendo a mi codicia
de perpetuidad,
mutando
en las infinitas mujeres
de mis aspiraciones,
reclinada en un espejismo,
usurpando los sueños
de cada una,
como esferas de utopías,
sin que mi esencia mute
por las arterias de la soberbia.
Ansío ser todas
las mujeres que habitan en mí
y llevar superpuestas
las pieles de mi trascender
en este universo de añoranzas
que echaron raíces
en mi propia existencia.
Elbi (Derechos reservados)
de espejos antiguos,
y esta mujer de hoy,
aliada invisible de mis días,
tallada a través
del cristal de mis ojos,
sobreviviendo a mi codicia
de perpetuidad,
mutando
en las infinitas mujeres
de mis aspiraciones,
reclinada en un espejismo,
usurpando los sueños
de cada una,
como esferas de utopías,
sin que mi esencia mute
por las arterias de la soberbia.
Ansío ser todas
las mujeres que habitan en mí
y llevar superpuestas
las pieles de mi trascender
en este universo de añoranzas
que echaron raíces
en mi propia existencia.
Elbi (Derechos reservados)
En el invierno de mi alma
Son tan cortos los días
que se fugan en un suspiro
fundiéndose con la noche
en un punto suspendido
entre el horizonte y el crepúsculo
adonde mi espíritu
es un hálito volátil
que la escarcha derrite
esfumándose en los dorados
de mis plátanos
con la luna cómplice
fumigando lágrimas
que caen impasibles
como lluvia de amaneceres
en laderas soleadas
y entonces se hace el alba
y los fragmentos de mi ser
se reclinan en el firmamento
de esta estampa de invierno
que reposa su hastío
en esos valles de hielo
de mi montaña
cuna de mi contemplación
esperanzada con alterar
el orden de mi destino
esculpido en las rocas
al rojo vivo de mi incertidumbre
deambulando mi aflicción
como aves noctámbulas
ascendiendo hacia una estela
que me abrigue del caos
y planeen serenas
a posarse silenciosas
al ras de mis hombros
como arrullo de tibezas
echando raíces
en la quietud de mis días.
Elbi (Derechos reservados)
que se fugan en un suspiro
fundiéndose con la noche
en un punto suspendido
entre el horizonte y el crepúsculo
adonde mi espíritu
es un hálito volátil
que la escarcha derrite
esfumándose en los dorados
de mis plátanos
con la luna cómplice
fumigando lágrimas
que caen impasibles
como lluvia de amaneceres
en laderas soleadas
y entonces se hace el alba
y los fragmentos de mi ser
se reclinan en el firmamento
de esta estampa de invierno
que reposa su hastío
en esos valles de hielo
de mi montaña
cuna de mi contemplación
esperanzada con alterar
el orden de mi destino
esculpido en las rocas
al rojo vivo de mi incertidumbre
deambulando mi aflicción
como aves noctámbulas
ascendiendo hacia una estela
que me abrigue del caos
y planeen serenas
a posarse silenciosas
al ras de mis hombros
como arrullo de tibezas
echando raíces
en la quietud de mis días.
Elbi (Derechos reservados)
Al borde sereno de mis anhelos
Hoy el cielo es mi techo,
los relieves de la montaña
son mis contornos,
las laderas doradas
mis extensiones,
el horizonte
mi regazo,
la naturaleza
mi mansedumbre,
el río y su cauce
mi expiación,
el hogar encendido
mi refugio.
Ascendiendo liviana
al borde sereno de mis anhelos.
Elbi (Derechos reservados de autor)
los relieves de la montaña
son mis contornos,
las laderas doradas
mis extensiones,
el horizonte
mi regazo,
la naturaleza
mi mansedumbre,
el río y su cauce
mi expiación,
el hogar encendido
mi refugio.
Ascendiendo liviana
al borde sereno de mis anhelos.
Elbi (Derechos reservados de autor)
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